lunes, 12 de marzo de 2007

Heroes

Esta es la gran novedad que ha llegado a la pantalla del cable en estos días. Gracias a la magia de la internet, para muchos no es novedad. Las hordas de fanáticos rompen continuamente las bolas de todo aquel que quiera (o no) oírlos, hablando maravillas de esta superproducción televisiva. Un pequeño gran presupuesto, efectos especiales de 2 pesos el kilo y un elenco multicultural y multietnico que hace gala de una gran corrección política por parte de sus creadores (al mejor estilo Lost).

La serie trata de varias personas de distintas partes del mundo que de un día para el otro se desayunan con que tienen superpoderes. Una idea que ya ha sido desarrollada cientos de veces en los cientos de comics de superherpes, perdón, superheroes que se publican por toneladas en la madre patria financiera (God bless America!). Y aunque la trama sea algo diferente, el fantasma de Lost esta presente constantemente.

La anterior mención a los comics no es azarosa. Uno de los responsables del programa es el mediocre guionista de historietas Jeph Loeb, quien ha escrito un solo comic decente en toda su mediocre vida ("Batman: The Long Halloween") y que es considerado uno de los grandes escritores del medio (lo que no habla muy bien del medio). El único trabajo decente de este tipo es formar parte de la producción de Lost en un cargo menor. También participa Tim Sale, cuyos dibujos (acá trasformados en cuadros) tienen mucho protagonismo en la trama. (Seguramente algún artista plástico encontrara algún blooper en lo que a técnica se refiere en esta parte de la serie)

Viendo el primer capitulo se puede ver uno de los por que de tanto fanatismo. O al menos, uno de los por que de tanto fanatismo entre los lectores de comics. Uno de los protagonistas, un oficinista japonés con mucha pinta de nerdo llamado Hiro, describe su nerda vida en la cual siempre fue un fucking looser y como sus nuevas habilidades de manipular el espacio y el tiempo lo colocan al lado de los superheroes de las historietas y el cine (y de paso se menciona como al pasar a una de las fuentes directas de "inspiración" de los guionistas: los X Men). Esto, al parecer, ha provocado la empatía de cientos de ñoños que levantan banderas aclamando al héroe nipón y, ya que estamos, a la serie en general.

Otros personajes son la típica rubia porrista yanqui (¡que original!) con poderes que la hacen invulnerable físicamente (aunque parece muy vulnerable por el lado emocional) ( de nuevo, ¡que original!), un artista que puede predecir el futuro en sus pinturas (pero solo cuando esta más drogado que Charly García), un candidato político que puede volar y su hermano (que no se sabe muy bien que poder tiene además de aburrir al espectador), entre otros (algunos de los cuales aparecerán en los próximos capítulos).

El único personaje que me pareció interesante es el de una mina que se dedica a hacer stiptease, que carga con crio, le debe plata a la mafia y cuyo reflejo en el espejo se comporta de forma extraña. (Ahí tenemos un argumento por demás interesante para una buena serie o película)

La trama presenta varias historias que ha a medida que pasen los capítulos se irán entrelazando al mejor estilo de Lost o de un Krzysztof Kieslowski desnutrido, atropellado y violado por 5 avestruces adolescentes mutantes ninja. Hay un misterio que no resulta demasiado atrapante y un villano que, por el momento, parece algo plano y un poco aburrido.

Hasta ahora la serie no me parece gran cosa. A lo mejor hay que darle tiempo, ya que el avance del próximo capitulo tiene buena pinta.

Y si bien las comparaciones son odiosas, el primer capitulo de Lost (hace ya tres años) fue cien veces mejor.